Como un niño jugando con la tierra,
voy a hundir mis manos,
hasta saciarme de ti.
hasta saciarme de ti.
Embrutecida y acalorada,
descubriendo las texturas,
escondidas tras los recodos,
de las curvas de tu piel.
Y cuando el calor se vuelva denso
bajo la manta de tu abrigo,
evaporados los suspiros
y el rugido venga a ti.
Descubriré el pozo subterráneo,
saciador de mi fiebre maldita,
terremoto bajo mis pies descalzos
que maltrechos, se desplazan hasta ti.
Sageleah
(PD: que duermas bien!)
No hay una vez que no lo lea y que no se me pongan los pelos de punta y te aseguro que lo he leído bastantes veces, tantas como para aprenderla ya de memoria ...
ResponderEliminarPor Dios que cosa mas intensa y bonita.
Gracias de nuevo por compartir toda esta maravilla.
Un fuerte abrazo.
Pal.
Uf, no me ves, pero me he puesto roja..jaja.
EliminarGracias a ti por tan generoso comentario, es agradable saber que hay gente al otro lado y bueno, que encima de compartirlo también le guste y le llegue lo que una escribe, pues ya ves... super "plus" de subidón para mí. :-)
Te agradezco Pal que me acompañes en esta nueva aventura. Gracias por participar.
Un beso. Sage.